Las espaldas gigantescas del Tesoro de EE.UU. cayeron como un mazazo sobre el mercado cambiario argentino. Desde que Bessent abrió el grito, el dólar cae 9%, dejando colgados de un pincel a los que compraron a más de $ 1.550. Los bonos también recuperan, con un riesgo país que pasó de ser alto a moderado. Pero lo mejor estuvo en la Bolsa y sobre todo en los ADR. Hay complicación con las tasas de interés, que siguen subiendo. Este martes IPC y Milei en la Casa Blanca. El miércoles, licitación para renovar deuda por $4 billones.
